17 de julio de 2020 a las 14:46 Muchas veces es demasiado duro.
Habíamos pensado mucho en esto, en que necesitábamos un espacio para el recuerdo, para la tranquilidad de pasar unos instantes y sentarmos. Para en esos días que perdemos a alguno de nuestros chicos, poder tener el lugar donde estar un rato en paz.
Hemos construido esto humildemente. Cada piedra lleva un nombre. Cada una un pequeño luchador que se ha ido para estar siempre como estrella.
Aqui llegan muchos perrines, a veces tan solo para pasar sus últimos momentos en vez de morir en una clinica solos. A veces terminales para no pasar dolor en un refugio. Y solo podemos convertirles en importantes por unos días, pues sabemos que van a irse.
Otras veces son los nuestros, los paraplejis y sus riñones malditos.
En estos meses nos han dejado TEO, WONDER, REINA y la ultima FURIA. Como si nos arrancaran trozos de alma.
Ojalá todos fuesen eternos.
Pero al menos, ahora, podemos sentarnos allí y pensar en ellos.
Cada piedra es uno, cada estrella en el cielo. Y son legión. Y nos miran desde allí, infinitos…
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