
Con el buen tiempo, nuestros perritos están más felices que nunca. Los paseos al sol, las siestas bajo los árboles y los juegos interminables hacen que sus días estén llenos de alegría.
Cada uno de nuestros pequeños es único: algunos son traviesos, otros tímidos, otros llenos de energía, pero todos tienen algo en común —un corazón enorme